Limitarte a la hora de disparar, asegurarse aún mas del enfoque, del encuadre y de la composición. Tomar una foto y no verla hasta pasado semanas y olvidar completamente que llevas en el carrete hasta que lo revelas son algunos hábitos que te aporta la fotografía analógica.Mi tardía afición por este mundo y el avance de la tecnología ha hecho que apenas haya revelado un par de carretes «propios».Probar una cámara de los 80, de la antigua República Democrática Alemana, ha hecho que vuelva a esta forma de tomar fotografías, a ser cool y vintage moderno (xD).
Os dejo algunas de las escasas 50 fotografías que llevo reveladas, vendrán más con el tiempo.
He de decir que ninguna tiene retoque alguno, quitando el enderezado de algunas torcidas. Pero realmente me gusta esos tonos tan ochentenos que saca.
Eso si cuando, como todas las primeras veces, pues tuve problemas al revobinar el carrete provocando algunas fotos que ahora se podrían calificar de «Lomescas».
Esto es todo por ahora.
¡Agur amigos!
P.D. Se agradecen coments, rtweets, me gusta, +1, aportación dineraria, jamones serranos…